El término “psicodélico” fue acuñado por el psiquiatra Humphrey Osmond, y significa “revelador de la mente”. En ese sentido, se utiliza para definir un amplio abanico de sustancias con mecanismos de acción diferentes, que comparten la capacidad de inducir un estado mental alterado o expandido, en el que se pueden dar experiencias muy variadas, en ocasiones indescriptibles o inefables, y que varían mucho entre personas y en función del contexto en el que tienen lugar.