Podría resultar insignificante este cambio de nomenclatura, pero resulta asombroso cómo el cerebro recibe y procesa dicho cambio de información lingüística; así no lo impregnamos de más conceptos negativos.
(…)
Aquí me referiré a lo que supone el estigma de padecer una adicción o una enfermedad mental. Dicho concepto ya de por sí tiene unas connotaciones negativas y supone, además de asociar o etiquetar a una persona con un diagnóstico, añadir juicios de valor por parte del entorno profesional, personal o familiar y, en general, olvidarse de la persona que hay dentro y por qué circunstancias ha llegado a la situación actual.
Esta misma estigmatización propicia el rechazo y/o aislamiento, del entorno y de uno mismo, y tan perjudicial es la estigmatización exógena como la endógena, ya que es esta última la que va destruyendo nuestro ser y nuestra esencia como persona y, en ocasiones, contribuye a la no aceptación de que se tiene un trastorno, que va quedando oculto bajo capas y capas de tristeza, culpa, vergüenza, rabia, desesperanza, etc.
Y me pregunto, ¿cómo y por qué se llega a ese extremo? Seguro que durante el camino han aparecido salvavidas que tal vez habremos rechazado para no ser descubiertos y por “el qué dirán”.
¿No merece la pena luchar por recuperar nuestra esencia como personas? Y mi respuesta es: ¡claro que merece la pena!
Galatea es el lugar perfecto para iniciar la reconstrucción personal.
Mil gracias, equipo Galatea.
Sólo tengo que decir que todo el equipo humano es insuperable, muy comprometido, muy profesional y muy acogedor.
Me han enseñado de nuevo a quererme, a cuidarme y ahora vuelvo a ser yo misma.
Me he comprometido para el resto de mi vida con la Clínica Galatea, mi agradecimiento más profundo. La experiencia ha sido muy gratificante en profesionalidad, compañerismo y cariño que he podido vivir y sentir para superar mi adicción, en este caso como paciente, es decir, desde el lado opuesto que me ha hecho crecer como persona.
Transmito mi agradecimiento a TODO el equipo de Galatea: immejorable en trato y profesionalidad. Seguid así, ¡ayudando!
Dentro del mundo sanitario siguen existiendo muchos juicios de valor sumamente insanos, y reconocer que uno mismo tiene el problema seguramente no es bien recibido por parte del equipo donde trabaje; es incongruente pero cierto. Para mí ha sido fundamental conservar el anonimato y la garantía de confidencialidad. Ojalá genere una divulgación exitosa de estos programas tan necesarios dentro del colectivo sanitario, ya que como dice el refrán, “en casa del herrero, cuchara de palo”.
Entré sin ilusiones, apática y muy triste, tras una baja de casi tres meses encerrada en casa.
Me voy hoy, un mes después del ingreso, camino de la vida, contenta por el trabajo que he hecho y que me habéis ayudado a hacer. Con ilusiones renovadas y activa.
El nuevo camino ha sido posible gracias a este mes que he compartido con vosotros. No era fácil, pero habéis hecho que sea una realidad.
En la maleta pongo las herramientas que he aprendido de nuevo, otras que había olvidado. Este equipaje es lo que me hace falta para retornar a la vida.
Ubicada en Barcelona, es el centro de desintoxicación y tratamiento de adiciones y trastornos mentales especializado en médicos y profesionales sanitarios.